“COMPLETO EN MI CARNE LO QUE LE FALTA A LA PASIÓN DE CRISTO…” – Colosenses 1,24-2,3

A primera vista nos parece algo fuera de lugar: que a la pasión de Cristo, a sus

sufrimientos, les falta algo?… siendo un acto eterno, infinito… y tan inmenso que ningún hombre era capaz de realizarlo?…

Es como si a la Cruz de Cristo la faltara una astilla… y esa astilla es mi cruz que debo arrimarla a la de Él.

Si leemos atentos, esta “alegría de poder sufrir por los demás”, no se refiere sólo al dolor o enfermedad, sino a todo esfuerzo o renuncia realizada para poder proclamar la Buena Noticia de Cristo…

O sea, que alcanza a todos: sanos, y enfermos o ancianos… todos podemos arrimar nuestro dolor, cansancio, desgaste, al de la Cruz de Jesús,

y junto al Suyo cobra valor de Salvación…

Jesús nos salvó en el “dolor”, en la Cruz… Y nos pide a sus discípulos, que “tome cada uno su cruz y lo sigamos!..” Y el que no es capaz de hacerlo, no es digno de Él…

Pablo dice que “por ello, me fatigo y lucho, con la fuerza de Cristo, que obra en mi poderosamente” (no es sólo con mis propias fuerzas!)

Y aclara más aún: “quiero que sepan qué dura es la lucha que sostengo por ustedes…”

Esta es la tarea de todo Bautizado…

pero no nos olvidemos de que la fuerza de Cristo actúa en nosotros!..

y da sentido a todas nuestras ‘cruces’…

LECTURAS DEL DÍA: Colosenses 1, 24-2,3; Salmo 61, 6-7.9; Lucas 6,6-11*

(*) VER el Evangelio: http://www.evangeliodeldia.org/main.php?language=SP

HOY recordamos a SAN JUAN GABRIEL PERBOYRE -1802/1840 - ver más en: http://es.catholic.net/op/articulos/35094/juan-gabriel-perboyre-santo.html

  

Semillas de Vida - Servicio de Espiritualidad  Parroquial

Día 11 de Septiembre de 2017 – Lunes