El Año de la Fe, debe ser un recuerdo AGRADECIDO por el Concilio Vaticano II (en su 50º Aniversario) y por la emisión del Catecismo Católico (en su 20º Aniversario)…
La Constitución Dogmática “Lumen Gentium”, dice:
«Cristo es la luz de los pueblos. Por ello este sacrosanto Sínodo, reunido en el Espíritu Santo, desea ardientemente iluminar a todos los hombres, anunciando el Evangelio a toda criatura con la claridad de Cristo, que resplandece sobre la faz de la Iglesia».
Desde la luz de Cristo que purifica, ilumina y santifica en la celebración de la sagrada liturgia, y con su palabra divina,
el Concilio ha querido ahondar en la naturaleza íntima de la Iglesia y su relación con el mundo contemporáneo.
Alrededor de sus cuatro Constituciones, verdaderos pilares del Concilio, se agrupan las Declaraciones y Decretos, que abordan algunos de los principales desafíos de nuestro tiempo.
Las enseñanzas del Concilio en continuidad con la Tradición y bajo la guía segura del Magisterio, deben ser recibidas y aplicadas…
(Congregación para la Doctrina de la Fe, el 6 de enero de 2012, introducción)
Pero para ello, debemos tomar conocimiento de cerca, de sus documentos…
De lo contrario, no sabremos qué nos enseña…
LECTURAS DEL DÍA: Hechos 22, 3-16, Salmo 116, 1-2; Marcos 16, 15-18*
Hoy recordamos LA CONVERSIÓN DE SAN PABLO, Apóstol – su vida es una respuesta a las Palabras de Jesús: “Vayan por todo el mundo, y anuncien el Evangelio” – ver más: http://es.catholic.net/santoral/articulo.php?id=732
Día 25 – Miércoles
- Responsable: Pbro. Rubén Papaleo - Coordinador y diagramador: Celso E. Pighin
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