El “hombre” al nacer, no es un ser formado… sólo posee la capacidad de educarse.
Necesita por tanto de maestros.
En la humanidad: siempre el niño y el joven reciben enseñanza en distintos ámbitos: familia, escuela, universidad, sinagoga, iglesia… etc
Todas las enseñanzas son o pueden ser enriquecedoras en la educación de una persona.
Pero Jesús no es uno más… sino “el Maestro”:
con su enseñanza infunde un alma a todas las demás… incide en la historia… y va más allá de la historia!
Es un Maestro que lleva a la plenitud todas las demás enseñanzas.
Más:
su enseñanza goza del Poder de Dios (que actúa en El) para hacerla eficaz en la vida de los hombres, y contribuye al servicio de su bien integral.
No obstante…
La Palabra Viva es escuchada con libertad y hace libres a los hombres…
Pero… hay quienes eligen ejercer su libre albedrío, para rechazar esa fuente de libertad!...
(Tomado de: Catholic.net – P. Octavio Ortiz – Coment. B- Domingo 4º del Tiempo Ordinario)
Señor, y Dios nuestro,
concédenos honrarte con todo el corazón,
y amar a todos con amor verdadero.
LECTURAS DEL DÍA: Deuteronomio 18, 15-20; Salmo 94, 1-2.6-9; 1 Corintios 7, 32-35; Marcos 1, 21-28*
Día 29 - Domingo
- Responsable: Pbro. Rubén Papaleo - Coordinador y diagramador: Celso E. Pighin
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